Etimología:
La palabra "apoyo" proviene del latín "appodiare", que significa "sostener" o "respaldar". Esta raíz etimológica nos remite a la idea de dar firmeza, sustento o ayuda a algo o alguien.
Ciencias Sociales:
En las ciencias sociales, "apoyos" se refiere a un conjunto de recursos y estrategias destinados a promover el bienestar y la inclusión de individuos o grupos. Estos apoyos pueden ser de diversa índole:
Apoyos materiales: Recursos económicos, vivienda, alimentación, etc.
Apoyos sociales: Redes de relaciones, acompañamiento, participación comunitaria.
Apoyos educativos: Programas de formación, adaptaciones curriculares, etc.
Apoyos psicológicos: Intervenciones terapéuticas, asesoramiento, etc.
Desde el paradigma de atingencia, estos apoyos deben ser pertinentes y adaptados a las necesidades específicas de cada persona o familia. Esto implica considerar las dinámicas familiares, las capacidades y los deseos de cada miembro, buscando fortalecer los lazos y promover la equidad.
En el ámbito de la Calidad de Vida de las personas con discapacidad, Verdugo et al. (2021) han propuesto el paradigma de la Calidad de Vida y Apoyos (CdVA). Al añadir el concepto de apoyo al de Calidad de Vida, el acento se pone en los servicios en lugar de en las personas. El paradigma de la atingencia, en cambio, pone el foco en el ejercicio de los derechos fundamentales de toda persona, que avoca para sí la jurisdicción de cuanto atañe a su intimidad. De esta manera, el paradigma de la atingencia está en línea con el enfoque de capacidades, que apunta al desarrollo íntegro de las personas en contextos saludables.
Abogacía Familiar:
En el ámbito de la abogacía familiar, los "apoyos" adquieren una relevancia especial en situaciones de vulnerabilidad o conflicto. Por ejemplo:
Apoyos para menores: Medidas de protección, cuidado, educación, etc.
Apoyos para personas con discapacidad: Asistencia jurídica, recursos para la autonomía, etc.
Apoyos en situaciones de violencia de género: Asesoramiento legal, protección, etc.
Desde la abogacía familiar, tanto la solicitud como la prestación de los apoyos proceden del entorno famiilar de la persona que está necesitada de ellos.
Se establece así una distinción importante en el proyecto de Familia Inclusiva: la atingencia muestra la acción desde la perspectiva de la persona necesitada de apoyo; mientras que la abogacía lo hace desde la solidaridad propia de la unidad familiar.
Verdugo Alonso, M. Ángel, Schalock, R. L. y Gómez Sánchez, L. E. (2021). El modelo de calidad de vida y apoyos: la unión tras veinticinco años de caminos paralelos. Siglo Cero, 52(3), 9–28. https://doi.org/10.14201/scero2021523928