La palabra natalidad tiene dos significados principales: el técnico o sociológico, que aparece en los diccionarios, y el político.
El significado técnico o sociológico: “La natalidad es el índice o proporción de nacimientos que se dan en un lugar y en un tiempo determinado. El índice de natalidad, junto con el índice de mortalidad, sirven para evaluar el nivel de crecimiento de una determinada población, lo que permite prever problemas y necesidades futuras y diseñar políticas acordes para enfrentarlos” (Significados.com)
El significado político, en cambio, no se basa en el hecho del nacimiento sino en el significado contenido en él. Lo que sucede en cada nacimiento es mucho más que un número en una estadística: aparece en escena el protagonista, la persona. La misma palabra “apariencia” cambia de significado gracias al nacimiento humano: deja de ser una palabra negativa, opuesta a la realidad (las apariencias engañan, se suele decir), para ser la realidad humana por excelencia. Por ser personas, cada una con su libertad y su mundo interior, nos movemos entre apariencias y tejemos narrativas de comunión en las que aquéllas son respetadas sin ser juzgadas.
El significado político de la natalidad se atribuye a san Agustín, que intuyó que en el nacimiento todo tiene su comienzo, pero ha sido Arendt (2003) quien ha puesto en la natalidad un fundamento político de toda sociedad, puesto que el nacimiento “no es el comienzo de algo, sino de alguien que es un principiante por sí mismo” (p. 201). A ella se debe en buena medida el abandono del concepto de naturaleza y su sustitución por el de natalidad. Según Arendt (1964), desde Platón hasta la debacle de la humanidad en los campos de exterminio, la filosofía política se basaba en la naturaleza y era en definitiva una filosofía de muerte, mientras que la política sólo puede basarse en la natalidad y en la vida. Por eso no permitía que se le denominara como una filósofa política.
La natalidad es el fundamento del giro y del criterio narrativos. Sólo la persona de carne y hueso es sujeto de las narrativas autobiográficas. Sólo las personas humanas nacen, es decir ni son reproducidas como si de objetos se tratara ni tampoco son simplemente paridas como si se tratara de animales. La persona humana es "hecha nacer" por las comunidades nativas que la dan a luz y la acogen en su seno respetando su dignidad absoluta.
Clase impartida en un curso de Fundamentos jurídicos del Trabajo Social en la que se explican las diferencias entre los conceptos de natalidad y de naturaleza